Con la publicación de la convocatoria del próximo Examen de Aptitud Profesional que permite el acceso al Registro Oficial de Auditores de Cuentas, conocido como Examen ROAC, se produce agitación y nerviosismo entre quienes aspiran a conseguir tan deseado APTO que les abra el camino en su carrera profesional dentro de este sector.
La superación de este examen, que tiene carácter bienal, permite la inscripción en el Registro Oficial de Auditores de Cuenta (ROAC) condición necesaria para poder ejercer la auditoría.
La prueba se desarrolla en dos fases:
Llegado este punto el aspirante se ve desbordado por una lluvia de cuestiones relacionadas con el qué, cuándo, cuánto, con quién y cómo preparar el examen ROAC, aparecen los primeros nervios y empieza a distorsionarse la realidad por culpa del estrés.
Además, las estadísticas de aprobados en convocatorias anteriores y los cambios recientes en la legislación regulatoria del sector, hacen que el examen sea percibido como una prueba difícil, pero ¡no es insuperable! porque aptitud y actitud no están reñidas.
Os dejamos algunos consejos que os servirán para afrontar positivamente estas últimas semanas de estudio y preparación.
El tiempo es imparable, por esto debemos de utilizarlo a nuestro favor.
Estas últimas semanas debes planificarlas de manera realista, analiza tu disponibilidad para estudiar, sin dejar de lado tus obligaciones, y diseña un planning exigente pero realista, teniendo en cuenta qué materias o áreas son las que más tiempo requieren y cuales no tanto.
Puedes dedicar a lo mejor una hora diaria para repasar aspectos y unas ocho o doce el fin de semana para practicar y hacer supuestos, por ejemplo, mide tu tiempo y hazte con su control.
No te obsesiones con la planificación, debe ser una guía, pero no un calvario, modifícala conforme detectes nuevas necesidades o surjan imprevistos, pero sin abusar.
También es muy importante que concilies tu vida familiar y el tiempo de ocio y esparcimiento, es necesario introducir paréntesis de desconexión para evitar el colapso y la ansiedad. Hay tiempo para todo.
Genera tu material de apoyo, puedes partir de las NIA-ES, la Ley de Auditoría, el Reglamento, Resoluciones, Consultas del ICAC, PGC, NOFCAC, legislación mercantil, etc. y así conforme lo vayas necesitando.
La normativa es importante que la estudies, la tengas trabajada y rápidamente puedas identificar qué y dónde está cualquier cuestión que te pueda surgir tanto en tu preparación del examen ROAC como el día de la prueba.
Entonces ¿qué material me llevo el día del examen? esta pregunta no tiene una respuesta unánime, aunque como mínimo llévate la normativa básica de auditoría (PGC, NIAS-ES, etc.) pero lo que sí te aconsejamos es que lleves contigo aquello con lo que te sientas más seguro y siempre que lo hayas trabajado previamente, para no perder más tiempo del necesario en las consultas que hagas durante el desarrollo de la prueba.
¡No olvides tu calculadora! Y haz de tu material tu mejor aliado.
Si el examen es práctico, ¿por qué no practicas?
Está claro que una buena base teórica sustenta cualquier aspecto práctico, pero es imprescindible que en tu preparación practiques supuestos de auditoría.
Se trata de convertir tu preparación para el examen ROAC en un entrenamiento, a base de prueba y error podrás detectar tus fortalezas y debilidades, este análisis te aportará mucha información para saber cómo afrontar con éxito los supuestos.
Este entrenamiento es también físico ¿estás preparado para escribir seis horas seguidas a mano? recupera el hábito de escribir a mano, trabaja la caligrafía, consigue una letra legible y ordenada que permita y facilite al tribunal la lectura.
Rodéate de aquellas personas que te quieren y valoran, siente el apoyo que te proporcionan y recoge fuerzas.
Es fácil sentir momentos de flaqueza y debilidad, es algo normal, nuestro cuerpo no está preparado ni físicamente ni psicológicamente para este último sobre esfuerzo; por esto es imprescindible que te rodees de un ambiente sano y motivador.
No estás sólo, tu familia, amigos y compañeros te acompañan en esta aventura, aunque no lo veas ellos sufren por ti y siempre te van a desear lo mejor.
Si necesitas ayuda técnica no dudes en buscarla, tienes a tu disposición una amplia oferta de cursos desde las corporaciones como el ICJCE y el REA, también existe la figura del preparador; y en esto nosotros te podemos ayudar a través del nuevo grupo de preparación que hemos abierto, con un módulo intenso y práctico enfocado a superar con éxito el Examen ROAC 2019.
Es una prueba, sólo eso. Personalmente te diré que en la primera convocatoria que me presenté suspendí, tras un análisis de qué había salido mal, aprendí que no se debe olvidar que el examen de acceso al ROAC es sólo una prueba, que se supera con un apto tras demostrar a un tribunal que tienes aptitudes para ser -reconocido oficialmente- lo que en tu día a día eres: auditor.